Oración a María Lionza
Madre mía, mi Reina María Lionza.
Tu culto es la gloria, tu nombre es divino.
Tu amor es la antorcha que alumbra el camino de nuestra conciencia.
Derrama tu luz de fe y de esperanza al divino niño Jesús.Reina María Lionza, por tu poder por los siete espíritus que te acompañan, no dejen que las estrellas me maldigan, ni que el cielo me borre mi ilusión, ni que Satanás ni los brujos me destruyan este pobre corazón.
Te suplico en compañía del espíritu del Monarca Hogún Balandó, de los espíritus: Candelo, Cépide de Gedé Limbo, Saúl Lemba, porque yo sin ti no tengo dicha ni consuelo, ni gloria tiene el cielo, ni vive él corazón y así de qué me sirve vivir en este mundo sin brújula, si rumbo, sin remo ni timón.
Amén. Que así sea.
Oración a María Lionza
Madre mía, Reina María Lionza,
guardián mío, madre de los humildes y desvalidos de los necesitados y oprimidos
de los buenos de corazón con toda mi fe te solicito oigas mi ruego para que
entre los ángeles, querubines y serafines en el esplendor espiritual de la
corte celestial y en el nombre de Dios Padre Todopoderoso me envuelvas con tu
paz y armonía con tu amor y fortuna me protejas en cuerpo, mente, alma,
espíritu y materia viva asimismo te ruego que protejas mi casa, mi hogar, mi
familia, mi persona, mi trabajo, mis amistades, para que no seamos mancillados
con envidias, mentiras, celos, maldades, malas influencias.
Te ruego, Madre Reina María
Lionza, me concedas esta petición y que siempre des luz a cada uno de mis pasos
y de los pasos de mis familiares y seres amados. Amén. Que así sea.
Madre mía Reina María Lionza, guardián mío, madre de todos los que con
humildad y buena fe te rogamos, yo te ruego en esta hora y en este momento que
accedas a mis súplicas, te ruego que intercedas con tu gracia celestial y
divina ante Dios Padre Todopoderoso para que sanes mi cuerpo, mi mente, mi
alma, mi espíritu y mi materia viva de dolores, de lamentos, de depresiones, de
malas vibras, de desgano, de desánimo, de debilidad, de tristeza, de baja
autoestima, de flojera, de miedo, de inseguridad, de dudas, de celos, de
egoísmo, de enfermedades físicas, mentales y espirituales.
Que tu divina
bendición me sane y te ruego mi dulce madre amada que me ayudes e intercedas
ante Dios Padre Todopoderoso por mi para que yo que pronto tenga fuerzas de
voluntad y energías físicas, mentales y espirituales para ejercer con éxito mis
labores cotidianas.
Madre mía, Reina María Lionza, te ruego y te imploro que accedas a mis
súplicas que con humildad te hago de todo corazón para que que me sanes en
cuerpo, mente, alma, espíritu y materia viva y que yo nunca deba recurrir a
operación alguna. Amén. Que así sea.